65 cualidades y defectos de una persona


Las cualidades son rasgos de una persona, objeto o circunstancia a la que les damos una valoración positiva.

Los defectos son aquellos rasgos a los que usualmente les damos una valoración negativa y pueden estar presentes como una respuesta a la carencia de ciertas cualidades.

Ejemplos de cualidades más comunes de una persona

Estos son algunas ejemplos de las cualidades más comunes en las personas:

1. Flexibilidad

Se refiere a la habilidad de adaptarse a las diferentes situaciones que se presenten, manteniendo la serenidad y enfocado en el logro de aquello que se desea. La flexibilidad es una de las cualidades más útiles en entornos difíciles, porque permite que la persona enfrente la situación sin dejarse sobrepasar por ella.

2. Discreción

Tiene que ver con el sentido de sensatez y adecuación al momento de hablar o actuar, manteniendo en el ámbito privado información personal o de terceros que por su relevancia, no debe ser conocida por todos.

3. Versatilidad

Es la capacidad para desempeñar múltiples tareas o roles. En ese sentido, un empleado versátil puede ser de mucha ayuda en una situación de contingencia al tener la capacidad de ejecutar otra tarea distinta a la habitual, de allí que sea una cualidad que puede tener un impacto positivo en el ámbito laboral.

4. Serenidad

Una persona que mantenga la calma no solo se está haciendo bien a sí misma, sino que ayuda a regular el entorno al transmitir una sensación de tranquilidad. Además, la serenidad permite encontrar soluciones mejor pensadas que cuando estamos en un estado de enojo.

5. Eficiencia

La eficiencia es la cualidad que permite el logro de un resultado de forma óptima. Una persona eficiente sabe gestionar su tiempo y recursos personales para lograr lo que se propone y hacerlo de manera impecable.

6. Gratitud

La gratitud es una cualidad de quienes valoran lo que poseen: sus vínculos, sus pertenencias materiales, sus logros, etc, así como muestran aprecio a los demás. Ser agradecido permite ver el lado amable de la vida y crea oportunidades para establecer relaciones sociales saludables.

7. Destreza

La destreza permite que las personas puedan ejecutar una tarea de manera rápida y eficiente, puesto que tienen las habilidades que se necesitan para ello. Una persona puede tener múltiples destrezas (físicas, manuales, mentales, emocionales), y al saber utilizarlas en el entorno adecuado puede generar resultados positivos individuales o colectivos.

8. Integridad

Una fortaleza o cualidad importante para la convivencia social es la integridad. Al hacer lo correcto, el cumplimiento de las normas adquiere sentido y se beneficia al colectivo.

9. Solidaridad

La solidaridad es una cualidad que se expresa cuando una persona es capaz de ayudar a otra, sin esperar nada a cambio más que la resolución del problema.

10. Lealtad

El compromiso de un individuo hacia una persona o causa es lo que se conoce como lealtad. Es una cualidad que hace que una persona sea considerada confiable, puesto que velará por los intereses de aquel o aquello a lo que es leal.

11. Optimismo

Ver el lado positivo de otras personas o situaciones es una cualidad que hace más llevadera la vida. Además, el optimismo permite encontrar soluciones a los problemas y ayuda a que los objetivos sean mucho más alcanzables. Ser optimista no implica negar la realidad, sino tomar lo mejor de ella para tomar decisiones acertadas.

12. Compasión

Tener la capacidad de conmoverse por el dolor del otro es lo que se llama compasión. Pero para ser compasivo no basta con entender las circunstancias ajenas, sino que implica intentar hacer algo por aliviar el dolor, malestar o situación desagradable que está causando daño al otro.

13. Curiosidad

La cualidad de mirar más allá de lo evidente, de querer explorar y aprender continuamente es lo que se conoce como curiosidad. Una persona curiosa no se conforma con lo que hay disponible, sino que indaga hasta obtener aquello que realmente quiere saber.

14. Atención

Una persona atenta es quien es capaz de concentrarse selectivamente en alguien o en algo, poniendo todos sus sentidos para comprender la información que recibe. Por esta razón, la atención requiere interés genuino.

15. Constancia

La constancia tiene que ver con mantener el foco en los objetivos y hacer lo necesario para cumplirlos, evitando caer en la decepción o el estancamiento cuando no se logra aquello que se desea.

16. Sentido del humor

Es la capacidad para ver las situaciones desde un punto de vista gracioso. El sentido del humor es necesario para afrontar las dificultades del día a día y restarles un poco de seriedad.

17. Nobleza

La nobleza es la ausencia de maldad. Quien es noble está actuando desde un lugar genuino de aprecio por el otro, por eso es una cualidad muy apreciada.

18. Transparencia

La transparencia es la cualidad de quienes pueden mostrarse tal como son, sin ocultar nada. Una persona transparente requiere ser íntegra, de tal manera que sus acciones sean congruentes con aquello que muestra al mundo

19. Puntualidad

Es la capacidad para gestionar el tiempo de tal forma que sea posible realizar una tarea o cumplir con un compromiso en un lapso determinado. Por eso, una de las formas más sencillas de demostrar que se posee esta cualidad es llegar a tiempo a todos nuestros compromisos.

20. Profesionalismo

Una persona caracterizada por su profesionalismo se destaca por ejercer su profesión u oficio de manera eficiente, comprometida con sus propias metas y con las del equipo en el que trabaja.

21. Empatía

Es la cualidad de comprometerse emocionalmente con lo que siente el otro. De allí la frase “ponerse en sus zapatos”, que quiere decir tener la capacidad de entender por lo que están pasando los demás.

22. Bondad

La persona bondadosa tiene la inclinación de hacer el bien sin esperar una recompensa por ello, ya que actúa genuinamente por el bienestar de los demás.

23. Compañerismo

El compañerismo implica actuar de manera correcta, respetuosa y solidaria con nuestros pares. Es una cualidad esencial en los equipos de trabajo para el logro de objetivos comunes.

24. Templanza

Es una cualidad de quienes pueden mantener el balance, al actuar con moderación. Esto es, esencialmente, tener la capacidad de no caer en excesos de ningún tipo.

25. Humildad

La humildad consiste en tener consciencia de nuestras cualidades y defectos y actuar de acuerdo a ello. Cuando conocemos nuestros límites, nuestras decisiones son más acertadas.

26. Orden

El orden es la capacidad para llevar a cabo múltiples tareas siguiendo un orden sucesivo, gestionando los recursos de la forma más eficiente posible. Esta es una cualidad muy apreciada en las empresas, porque significa que el empleado es capaz de cumplir con sus responsabilidades de forma organizada.

27. Proactividad

Ser proactivo significa tener la capacidad de anticiparse a las situaciones y actuar para resolverlas. Una persona proactiva tiene iniciativa y no espera a recibir órdenes para solucionar un problema. Por eso, esta cualidad es una de las más apreciadas en los entornos empresariales que valoran la autonomía de sus empleados.

28. Honradez

La honradez es una cualidad que implica el apego a las normas sociales y a los valores propios, teniendo siempre como norte el apego a lo que es verdadero, correcto y beneficioso para el colectivo. La honradez es una cualidad muy valorada porque quienes son honrados son dignos de confianza.

29. Sensibilidad

La sensibilidad es la capacidad de reconocer las emociones propias y de otros. Una persona con sensibilidad tiene una aguda inteligencia emocional y es capaz de expresar asertivamente cómo se siente.

30. Paciencia

La paciencia requiere saber esperar por un resultado, tolerando las adversidades. La persona paciente sabe que su esfuerzo dará frutos, pero no lo apresura, por eso es una cualidad esperada en quienes deben liderar equipos y lograr metas a mediano y largo plazo.

31. Espíritu competitivo

Una persona con espíritu competitivo está comprometida a dar lo mejor de sí no solo para lograr una meta. En el ámbito laboral, un líder con un espíritu competitivo saludable puede llevar a un equipo a superar las expectativas. Esto se traduce en productividad y eficiencia.

32. Prudencia

Se trata de la capacidad de actuar con moderación, considerando las implicaciones que pueden tener las acciones propias o ajenas en una situación. Una persona prudente es discreta y sabe cómo y cuándo puede asumir el liderazgo, por eso es una cualidad muy valorada en el ámbito laboral.

33. Sinceridad

La sinceridad es la capacidad para actuar de forma transparente, siendo honestos con lo que pensamos y sentimos con respecto a algo o a alguien. En el ámbito laboral, una persona sincera puede aportar una visión realista sobre una situación, sin intenciones ocultas.

34. Tenacidad

Una persona tenaz es aquella que no desiste de alcanzar sus objetivos. Supera los obstáculos y hace todo lo necesario para salir adelante. En el trabajo, la persona tenaz buscará soluciones a los problemas, de allí que sea una cualidad que puede ayudar a que el ambiente laboral sea mucho más competitivo.

Te puede interesar ver también Conducta y comportamiento.

Ejemplos de defectos más comunes de una persona

Los defectos son características que tienen una connotación negativa. En muchos casos, los defectos expresan la falta de una o varias cualidades. Estos son algunos ejemplos de los más comunes:

1. Pereza

La pereza expresa un desinterés por los objetivos propios y ajenos y se manifiesta como una negligencia al momento de cumplir con ciertas obligaciones personales y laborales.

2. Temor al cambio

Si bien no todos los cambios son positivos, al tener temor de afrontar lo nuevo, las personas corren el riesgo de quedarse estancadas en términos personales, creativos, laborales, sociales, etc.Entender los cambios no significa estar de acuerdo con ellos, sino que se aceptarlos como parte de procesos aún mayores.

3. Torpeza

La torpeza es un defecto que puede expresarse de manera física (ser poco hábil con las manos, al hablar, etc.) o en términos emocionales, al desconocer cómo comportarse adecuadamente en una situación, por ejemplo.

4. Incompetencia

La falta de competencia no es un defecto en sí mismo, ya que es imposible ser competente en todas las áreas. Sin embargo, sí puede volverse un problema cuando se asumen tareas para las que no se está preparado, ya que se pueden cometer errores graves.

5. Desorganización

La ausencia de organización muchas veces está vinculada a la pereza, ya que existe un desinterés en planificar y ordenar. Una persona desorganizada difícilmente puede ser eficiente, ya que no sabe gestionar sus recursos para alcanzar sus objetivos.

6. Indiferencia

La falta de sensibilidad ante ciertas situaciones denota falta de solidaridad y empatía. La indiferencia es un defecto que tiene repercusiones en el colectivo, por lo tanto, es un factor desestabilizador para la convivencia ciudadana.

7. Crueldad

Cuando la ausencia de empatía genera dolor o hace daño a terceros, se convierte en crueldad. Al igual que la indiferencia, la crueldad es un obstáculo en la construcción de relaciones interpersonales y sociales sólidas y es un defecto que puede tener un importante impacto negativo en el entorno.

8. Radicalismo

La persona radical no da cabida a otro tipo de razonamiento que no sea aquello en lo que cree, aunque la evidencia demuestre que su punto de vista es inválido total o parcialmente.

9. Envidia

La envidia es una expresión de falta de confianza en los recursos propios. Quien es envidioso, simplemente desea lo que otros tienen porque se siente incapaz de conseguirlo por sí mismo, de allí que sea un defecto vinculado a la falta de autoestima.

10. Egocentrismo

El egocéntrico necesita que todo gire a su alrededor, por lo tanto, es posible que muestre otros defectos como indiferencia e incluso crueldad, con tal de atraer la atención. El egocentrismo impide el logro de objetivos comunes, ya que todo esfuerzo estará dirigido al logro individual.

11. Cinismo

El cinismo es un defecto propio de quienes ven la vida a y los demás con desfachatez y desconfianza. Precisamente por ello, se trata de personas en quienes resulta difícil confiar.

12. Ignorancia

El desconocimiento en sí mismo no es un defecto. Sin embargo, el ignorante carece de la humildad necesaria para aceptar que desconoce aquello sobre lo que se discute y, peor aún, puede contribuir a esparcir aquello que considera su verdad, aunque no tenga fundamentos.

13. Violencia

La violencia es un defecto que se puede expresar de forma individual o colectiva, y en ningún caso resulta conveniente en una sociedad civilizada. Por esto el comportamiento violento suele ser poco tolerado y severamente castigado en la mayoría de las legislaciones existentes.

14. Deshonestidad

La falta de transparencia genera desconfianza, pero además puede terminar por dañar a terceros, de allí que sea un defecto poco tolerado.

15. Imprudencia

El imprudente carece de una noción de oportunidad para decir y hacer las cosas, y dependiendo de la gravedad de sus acciones, puede hacerle daño a otros, aunque no haya sido su intención inicial.

16. Irrespeto

La incapacidad para respetar a los demás generalmente expresa una falta de respeto propio. Esta ausencia de límites personales se manifiesta en los vínculos sociales de muchas formas: en forma de impuntualidad, falta de solidaridad, falta de educación, etc.

17. Vulgaridad

La vulgaridad no solo se expresa en el uso de palabras altisonantes, sino en la forma de comportarse. La falta de modales, el comportamiento tosco u ofensivo expresan vulgaridad.

18. Mal humor

La ausencia de sentido del humor implica también una falta de flexibilidad, ya que a la persona le resulta imposible distenderse y asumir las situaciones de una forma un poco más relajada. Esto puede ser un obstáculo para generar vínculos sociales auténticos o para generar un ambiente de trabajo armónico.

19. Egoísmo

La persona egoísta solo piensa en sí misma y en su beneficio. Esta actitud pervierte la convivencia social, que requiere de personas que no solo se comporten de acuerdo a las normas, sino que sean capaces de pensar en quienes le rodean.

20. Amargura

Una persona amargada está llena de resentimiento, bien sea porque fue víctima de una injusticia o porque cree que merece algo que no tiene. En cualquier caso, su actitud le impide ver el lado bueno de la vida, y esto puede ser un obstáculo para relacionarse adecuadamente.

21. Cobardía

La cobardía es la ausencia de valor, lo que causa que las personas eviten los retos y desafíos de la vida. Una persona cobarde piensa y actúa desde el miedo, y eso puede llevarla a tomar decisiones poco comprometidas.

22. Pesimismo

Una persona pesimista está condicionada a ver solo la parte negativa de las cosas. Y la falta de objetividad la puede llevar a tomar decisiones erradas que comprometan su bienestar o el de su entorno.

23. Hipocresía

La persona hipócrita es, también, deshonesta, ya que no muestra sus verdaderas intenciones. Además, su deseo por ser o poseer aquello que le pertenece a otros, la puede llevar a ejecutar acciones que perjudiquen a su entorno. Por lo tanto, no es una persona digna de confianza.

25. Soberbia

La soberbia es la creencia de ser mejor que otros, bien sea en el ámbito intelectual, emocional o material. Esto les impide ver sus defectos o aceptar sus errores, por lo tanto es difícil relacionarse con ellos.

26. Autoritarismo

La persona autoritaria abusa de su poder para imponer su criterio o para obtener beneficios. El autoritarismo no suele ser tolerado en las empresas, ya que compromete el bienestar del equipo y por lo tanto, pone en riesgo el cumplimiento de los objetivos comunes.

27. Arrogancia

La arrogancia es un defecto de quien se cree superior al resto y actúa en consecuencia, irrespetando a los demás. Un equipo de trabajo con un colaborador o líder arrogante, difícilmente podrá lograr sus objetivos, ya que su actitud impedirá que el trabajo fluya adecuadamente.

28. Deslealtad

La deslealtad es la falta de compromiso o fidelidad hacia una persona o institución. Una persona desleal no puede ser un buen prospecto para una empresa, ya que no podrá alinearse de forma sincera con los valores y objetivos que esta tenga.

29. Resentimiento

El resentimiento es una cualidad negativa de quien guarda rencor, molestia o frustración por algo que ocurrió en el pasado y que aún no ha logrado superar. Un empleado movido por el enojo o la tristeza por situaciones laborales puede tomar decisiones que lo afecten a él o al equipo de trabajo.

30. Avaricia

La persona avara necesita acumular recursos aunque no los necesite, por esto, la persona avara es egoísta, ya que solo piensa en sí misma. Y una persona que piensa solo en su propio beneficio no puede ser un buen colega ni un buen líder.

31. Imprudencia

La imprudencia es un defecto propio de quienes actúan por impulso, sin medir las consecuencias de sus actos.En el trabajo, la imprudencia puede generar conflictos entre compañeros y entorpecer el logro de metas comunes.

Ver también: